El 1 de Octubre se celebra el Día del Mayor, y este año hemos querido hacer una jornada en la que nuestros residentes volvieran a realizar juegos tradicionales y rememoraran su infancia, pudiendo compartir con los asistentes sus experiencias, sus aptitudes, sus entretenimientos y en definitiva parte de su pasado.

Para ello, se organizaron en los jardines de la residencia distintas actividades tales como:

• Carrera de huevos
• Juegos de memoria
• Tres en raya (elaborado por las propias residentes)
• Parchís
• Juegos de destreza
• Encesta la pelota

Como cada año venimos haciendo, es tradición que el mes de Mayo visitemos a nuestra Patrona La Virgen de la Fuensanta en su Santuario y le hagamos una ofrenda floral.

Este año no podía ser menos, y gracias a la colaboración del personal y de las familias, fue posible pasar una agradable velada junto a nuestra patrona.

Una jornada de convivencia con los feligreses y voluntarios de nuestra Parroquia San Francisco Javier-San Antón. Una tarde de alegría y diversión en un entorno inmejorable que culminó con una merienda para todos los residentes y familiares.

Como cada año coincidiendo con la entrada de la primavera celebramos las Jornadas de Convivencia en las que se lleva a cabo la Celebración de la Eucaristía con la colaboración del Coro de la Hermandad del Rocío de Murcia.

Aunque este año la lluvia nos impidió celebrarlo como cada año en nuestro precioso jardín, nada nos frenó para organizarlo en los salones del centro.

Además se ha realizado la coronación de la Reina elegida por compañeros, familiares y trabajadores. Este año la Reina ha sido Dña. Carmen Soto, una señora con una fortaleza inmensa y un carácter de lucha que ha hecho que a pesar de su enfermedad haya conseguido de nuevo andar.

Francisco Buendía, nació el 17 de marzo de 1915 en Zarandona, donde se crió junto con sus siete hermanos. Siendo él el cuarto de ellos.

La vida de «El tío Paco» como lo conocemos en la Residencia El Amparo donde vive desde hace dos años, ha sido cuanto menos intensa. Estuvo en el frente donde se le dio por desparecido. A su regreso conoció a la que sería la mujer de su vida y se casó yéndose a vivir a la Alberca donde trabajara de cocinero y camarero en los Maristas.

Hace 30 años, el Padre Joséico y Dña. Clotilde Martínez Boíx, sembraron y configuraron lo que era una idea en sus corazones generosos, aportaron valores evangélicos y con escasos recursos y la ayuda altruista de innumerables personas fraguaron lo que hoy es un gran proyecto consolidado.

Atrás quedan años de esfuerzo e ilusión que han llevado a esta residencia a situarse entre las más conocidas y reconocidas de la Región. Desde sus comienzos hemos sido testigos de grandes cambios y transformaciones, de mejoras y remodelaciones de las instalaciones, adaptándolas a los requisitos exigidos por la Comunidad Autónoma para su acreditación y posterior concierto de plazas con el IMAS.